Seguimos en las mismas

No se avanzó, no se dio marcha atrás: así fue el 2005 para la economía costarricense.
Hubo mejoras notables en la industria manufacturera, el comercio y la construcción y los servicios (turismo, telecomunicadiones, etc.) que moderaron su crecimiento, pero mantuvieron tasas de expansión superiores al promedio de la economía.
Además, las exportaciones representan el sector que proporcionó la mayor parte del crecimiento real y la demanda iterna continuó creciendo a un ritmo moderado.
En el sector público las políticas de "austeridad", que significaron un esfuerzo por controlar el gasto en rubros como las transferencias a entidades gubernamentales e inversión pública. Se logró reducir a un 2,0% del producto el déficit financiero, pero mediante estrategias dudosas que incluyen recortes y postergamientos. Aún así, Costa Rica siguió presentando una inflación del 14,2% al concluir el año.
La política monetaria no logró contrarrestar los efectos sobre los precios internos generados por los aumentos en los precios internacionales, de las principales materias primas, a pesar de que se retiró liquidez del sistema financiero por alrededor de 400 mil millones de colones. Así, la tasa de inflación anual se mantuvo sobre un 13,0% en el 2005.
Mientras tanto, el gobierno de Abel Pacheco continuaba desarticulado, indeciso y sin oposición fuerte. Se prometió la aprovación del Plan Fiscal y se negoció un TLC con Estados Unidos desde una posición de debilidad.
Con esos antecedentes, el 2006 perfila ser un año muy similar al anterior, con un crecimiento del producto interno a ritmo moderado y una dependencia hacia los mercados de materias primas internacionales -en especial al de hidrocarburos-.
El alza en las tasas de interés internacionales y la presión social que, luego de dos años de "austeridad" exigirá inversión en lo público, pueden deteriorar las finanzas públicas. Es decir, puede ser que la sociedad le pase finalmente la factura a un estado que siguió estrategias de efectividad momentánea.
Los tan esperados cambios, en el 2006, vendrían de la mano de las decisiones que tome el recién electo gobierno de Oscar Arias.
Para ello, convendría que por fin se ocuparan del asunto fiscal, se reinvirtiera en infraestructura, se promovieran las exportaciones y las inversiones extranjeras y se volviera la mirada hacia el sector social inyectándo capital en áreas como la salud, la educación y la seguridad.

Basado en: "La Economía Costarricense en el 2006. ¿Punto de inflexión política?" Por: José Luis Arce. Revista Actualidad Económica, No. 329, Año XIX, 2005.